Activación de Nuestra Estructura Cristalina Interna

Toda existencia se compone de una estructura cristalina, independientemente de pertenecer a un plano físico o espiritual. Esta estructura establece la conexión entre todo, de forma que todos formamos parte de una inmensa cadena de entidades, de mentes, de realidades, de manifestaciones.
Las estructuras cristalinas hay que ir activándolas para que se pueda establecer la cadena. En el caso de nuestro planeta y de todo ser viviente que lo habita debe establecerse este despertar para que se dé la elevación adecuada. El ser humano debe ser consciente de la importancia de este hecho. Esta estructura cristalina ha de activarse con el fin de re-ordenar y reestructurar las células cristalinas que forman parte de nuestra estructura genética, a la par que se unifica a la estructura universal.
La activación se compone de tres fases, aunque puede que hubiese que repetir alguna si la persona no integra la energía adecuadamente. Es una nueva forma de integración y aceptación del ser de luz en íntima frecuencia con los cuerpos cristalinos de otros planos dimensionales y los que habitamos Gaia, desde nuestro territorio de 5ª y 6ª dimensión.
Toda estructura viva posee una base cristalina adaptada a su genética y necesidades de existencia en todos los planos. No penséis que una estructura cristalina es como lo vemos en nuestro plano de 3ª, porque no es así, es una inmensa estructura canalizadora de luz y, es esta luz, la que llega a los diferentes lugares orgánicos y en los diferentes planos.
Nuestros organismos están sintonizados a los distintos planos y nuestras capas áuricas, chakras y canales han de estar sintonizados con ellos, así que es muy importante entender que, si no se produce esta unificación, no podrá darse la sintonización.
Para poder conseguir la activación de los cristales, es imprescindible que se abra la consciencia al proceso que se va a dar, ya que tenemos de ser conscientes de lo que implica este proceso de “Activación de la estructura cristalina del núcleo celular”.
Esta activación va ligada a la Interconexión de los cuerpos y a la conexión con la estructura cristalina planetaria y la estructura cristalina galáctica. Estas estructuras, a su vez, poseen la capacidad de fusión con el Cristal central, Creador central, estructura cristalina en consonancia con el origen kósmico.
Todo el Universo, todo lo existente en los diferentes planos, tiene una estructura atómica cristalina, de forma que tendremos que aprender a trabajar en esta frecuencia, a sintonizar en esta frecuencia. Los cristales son nuestros mayores aliados y, poco a poco, tenemos que incluirlos en nuestras terapias y vida cotidiana. Los cristales no son nuevas “piedras” como se dice, son estructuras con consciencia derivadas de la mente pensante original como primera forma de vida visible, pero en el plano atómico se debe entender el mismo proceso, pues su base es nuestra base y es la base de todo lo creado y espiritual, todo uno.
Cuando las estructuras se vayan activando y uniendo, todos formaremos parte de una cadena cristalina de inmensidades inconmensurables. La célula atómica y el átomo en sí será activado en una frecuencia mayor a la establecida actualmente y los cuerpos de luz se fusionarán a los otros cuerpos, dando origen al nuevo ser.
Es por esto también que se nos está indicando como hacer los Mándalas Cristalinos como forma de anclar 5ª y 3ª dimensión, aunque se esté haciendo para anclar ciudades a esos planos, da igual en realidad, ciudades, personas, cosas, objetos, en realidad lo que hacemos es anclar 5ª a 3ª, para así ser elevada la 3ª dimensión a través de la 5ª, es una ayuda mutua.
Cada Mándala hecho con cristales específicos, es una activación cristalina de 5ª dimensión y es muy parecido a lo que tenemos que hacer para poder activar nuestra estructura atómica cristalina. Introduciéndonos dentro de un mándala y siguiendo una serie de pautas de ayuda, nada más, sencillo pero muy gratificante.
El proceso se hace mediante la activación de un Mándala Cristalino alrededor de la persona. Puede hacerse tumbado o sentado en el suelo, pero en cualquier caso los cristales utilizados han de ser los mismos y colocados de igual forma.
El proceso consta de 3 fases, en las que se utilizan 5 grupos de cristales diferentes. La colocación se realiza poniendo cada grupo, de uno en uno, de forma que el individuo esté totalmente cubierto de la energía del Mándala cristalino de luz. En esta situación, se estará 30 minutos, pero importante es que cuando se haga la activación se acompañe de algún tipo de petición similar a la Gran Invocación. Cuando se haga la invocación, se activa el mándala con unas pautas concretas, pues no se puede quedar sin luz. En este estado, se podrá hacer la activación por un terapeuta o compañero, si es que no se puede hacer por uno mismo por no tener los cristales adecuados o no sentir la fuerza necesaria para hacerlo uno solo.
Cada fase tiene una frecuencia diferente y una intensidad diferente, de forma que se vaya incrementando para ir elevando cada vez más la energía y, que la persona, se vaya acomodando al cambio. Podrán hacerse en 3 días diferentes o en el mismo día, una detrás de otra, si es que la persona lo aguanta. Pero en cualquier caso, las 3 fases son los 3 niveles de frecuencia que hay que ir adquiriendo hasta completar el proceso de total activación de la Estructura cristalina del átomo de la celular.
Una vez realizado este trabajo, iremos sintiendo dentro de nosotros toda una serie de cambios acordes con lo que nuestro ser interno y la información de nuestro ADN nos aporte, así sentiremos esta re-estructuración como una forma de potenciar los cambios y de entender mejor quien realmente somos y lo que queremos, con solo mirar dentro. Es una forma fácil de poder acceder a lo más profundo de nuestro ser, en resonancia con la luz que albergamos dentro y que no siempre sabemos sacar o conectar con ella. Cuando la estructura de luz interna está a plena frecuencia, no solo nosotros somos capaces de sentirla sino todo aquel que se acerque y perciba lo que irradia nuestro ser, lo que podemos compartir con toda naturalidad y sin temor a ser dañados o influenciados, pues nuestro propio ser de luz evitará el contacto con energías de vibración más densa.
Esta maravillosa técnica de elevación del ser, podréis disfrutarla si así lo deseáis y compartirla con todos los que se aproximen a vosotros.