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Porque es el camino más difícil el que despertará tu mayor fortaleza. La fuerza no la verías en ti si no te hubieras visto obligado a hacerlo.
Muchas personas exitosas hablarán sobre el agradecimiento que sienten por sus grandes luchas. En retrospectiva, ellos saben que si no hubiera sido por esos desafíos, no habrían encontrado una fuerza profunda en su interior. La dificultad a menudo es un componente clave del gran éxito. Estamos aquí para crecer.
Algunas de las mentes más brillantes en teoría psicológica han hablado de este impulso hacia el crecimiento. El humanista centrado en el corazón, Carl Rogers, cree que estamos innatamente programados para auto-realizarnos (es decir, para sanar y evolucionar).
Creas en el proceso es espiritual o no, no importa realmente. Lo que sí importa, es que cuentas con una inherente unidad interna para crecer y cambiar. Es un deseo tácito dentro de todos nosotros.
Mientras caminas intentando ser consciente y amante del camino, las pruebas serán más y más difíciles. Tal vez no era lo que esperabas cuando te inscribiste en la vida consciente.
Tal vez estas atrapado en la falsa creencia de que todo seria increíble todo el tiempo, y si no es así, significa que estas haciendo algo mal. Esto no podría estar más lejos de la verdad.
A veces, cuando luchas se presentan, la pregunta es…: “¿Por qué a mi?!” Dudas de estar listo para el reto. Entonces, después de una buena cantidad de resistencia, al final vuelves a la senda del corazón…y sabes lo que sucede? Siempre? Asciendes.
Los mayores contratiempos, las luchas más difíciles, los momentos en los que realmente no crees en ti, son las experiencias exactas que te obligan a ser más grande de lo que nunca fuiste antes.
Aparece una fuerza tan poderosa dentro de ti, que te permite superar cualquier reto. Descubres incluso un nivel más profundo de tu ser y el propósito de estar aquí.
Si te identificas con el camino espiritual y los desafíos surgen, por favor, no te culpes o creas que estás haciendo algo mal. Los desafíos te sirven para lograr la versión más grande de ti, humanamente (y, en algunos casos, no tan humanamente) posible. Todo es parte del plan maestro.
Elévate a la altura de las circunstancias. Muestra lo que tienes. Confía, tienes lo que necesitas.
Muchas personas exitosas hablarán sobre el agradecimiento que sienten por sus grandes luchas. En retrospectiva, ellos saben que si no hubiera sido por esos desafíos, no habrían encontrado una fuerza profunda en su interior. La dificultad a menudo es un componente clave del gran éxito. Estamos aquí para crecer.
Algunas de las mentes más brillantes en teoría psicológica han hablado de este impulso hacia el crecimiento. El humanista centrado en el corazón, Carl Rogers, cree que estamos innatamente programados para auto-realizarnos (es decir, para sanar y evolucionar).
Creas en el proceso es espiritual o no, no importa realmente. Lo que sí importa, es que cuentas con una inherente unidad interna para crecer y cambiar. Es un deseo tácito dentro de todos nosotros.
Mientras caminas intentando ser consciente y amante del camino, las pruebas serán más y más difíciles. Tal vez no era lo que esperabas cuando te inscribiste en la vida consciente.
Tal vez estas atrapado en la falsa creencia de que todo seria increíble todo el tiempo, y si no es así, significa que estas haciendo algo mal. Esto no podría estar más lejos de la verdad.
A veces, cuando luchas se presentan, la pregunta es…: “¿Por qué a mi?!” Dudas de estar listo para el reto. Entonces, después de una buena cantidad de resistencia, al final vuelves a la senda del corazón…y sabes lo que sucede? Siempre? Asciendes.
Los mayores contratiempos, las luchas más difíciles, los momentos en los que realmente no crees en ti, son las experiencias exactas que te obligan a ser más grande de lo que nunca fuiste antes.
Aparece una fuerza tan poderosa dentro de ti, que te permite superar cualquier reto. Descubres incluso un nivel más profundo de tu ser y el propósito de estar aquí.
Si te identificas con el camino espiritual y los desafíos surgen, por favor, no te culpes o creas que estás haciendo algo mal. Los desafíos te sirven para lograr la versión más grande de ti, humanamente (y, en algunos casos, no tan humanamente) posible. Todo es parte del plan maestro.
Elévate a la altura de las circunstancias. Muestra lo que tienes. Confía, tienes lo que necesitas.